Ayer, durante un concierto de música clásica, tuve la suerte de encontrarme con
alguien que me recordó un poema que recité , hace aproximadamente
un año, durante una velada. Se trata de unas palabras que encontré en el libro de
Chejov, » Mi vida», e ignoro si corresponde a un dicho ruso o es invención del autor.
Reza así:
«La oruga arruina el bosque
el orín, el hierro
la mentira, el alma»
Considero que es una extraordinaria metáfora. El poema concentra la sabiduría de la
naturaleza biológica y la psique humana, que también es naturaleza biológica.
Sanar estas almas arruinadas supone un ímprobo trabajo…
Emociones de alas rotas, a las que cuesta volar.
Sólo la auténtica decisión de aceptar la verdad y limpiar lo devastado, conseguirán sanar estas almas.